La decimocuarta versión de la Beast de Brooks Running presenta una serie de características que la convierten en un modelo de esos denominados como "devorakilómetros", dado que esta zapatilla de running sobresale por su máxima estabilidad y control de la pronación, por su óptima amortiguación y por su gran comodidad.

Así, la Brooks Beast 14 está catalogada como el modelo de mayor soporte de la firma norteamericana, dado que trae consigo el progresivo sistema estabilizador Diagonal Rollbar, que proporciona un control óptimo de la pronación y sobrepronación. Con ello se contribuye a que la experiencia de carrera sea única.

A pesar de la robustez que tiene la zapatilla con un drop de 12 milímetros y 390 gramos de peso, la Brooks Beast ofrece al corredor una sensación de amortiguación extremadamente suave, gracias a su entresuela BioMoGo DNA, capaz de adaptarse de forma dinámica a cada zancada, a la vez que dota al modelo de un cómodo ajuste personalizado.

Transiciones más suaves

Con la idea de que se ejecuten transiciones más suaves, la Brooks Beast 14 incorpora la exclusiva almohadilla Segmentend Crash Pad, incorporados en otros modelos más mediáticos de Brooks Running, tales como la Ghost 9 o la Cascadia 11.

Por otro lado, el upper de las Brooks Beast 14 llaman la atención por su malla transpirable para mantener los pies secos y frescos en todo momento. Además, la Beast 14 está confeccionada con materiales biodegradables, lo que también contribuye a la protección y el cuidado del medio ambiente.

Diseñadas para resistir, las Brooks Beast 14 está concebida para corredores con sobrepronación o pronación, que habitualmente corren por asfalto, pero, siempre a ritmos más bien tranquilos.